(EFE) Casi un centenar de campesinos bloquearon la
principal carretera de la selvática provincia de Tocache, en
el noreste peruano, en protesta contra el programa
gubernamental para erradicar los cultivos de hoja de coca, el
principal insumo para la elaboración de cocaína.
El representante del gobierno regional de San Martín, al
cual pertenece Tocache, Cecil del Águila, dijo hoy a Efe que
los cocaleros "han bloqueado ambos extremos de la
carretera", que conectan a esta localidad selvática con
las ciudades de Juanjuí y Tingo María.
Agregó que los manifestantes "han empezado los actos
de vandalismo, están pinchando las llantas (neumáticos) de
los vehículos y obstaculizando el libre tránsito en la
zona".
Los cocaleros de Tocache, zona declarada desde hace varios
meses en emergencia, protestan desde la semana pasada contra
la erradicación de sus cultivos por parte del Proyecto
Especial de Control y Reducción de los Cultivos de Coca (CORAH).
Las protestas de los cocaleros se agravaron la víspera con
los enfrentamientos entre este colectivo y la policía peruana,
que dejó al menos un herido de bala, según informó el
rotativo peruano La República.
La víctima es el presidente de la Asociación de Cocaleros
Saúl Guevara Díaz de Tocache, Wilder Satalaya, aunque una
portavoz del Ministerio peruano del Interior dijo a Efe que
los efectivos policiales no utilizaron armas de fuego.
Ante las protestas, el presidente peruano, Alan García,
afirmó hoy que su gobierno "no dará ni un centímetro
atrás" para aplicar la ley en Tocache, tras insistir en
que existe una erradicación voluntaria la planta por parte de
muchos campesinos que se han acogido a los programas de
desarrollo alternativo.
Además, advirtió que otros grupos con ideología "extremista
y violentista, y una parte aliada al terrorismo"
prefieren no erradicar sus cultivos y ponerse "bajo la
sospecha de producir solamente para el narcotráfico con el
argumento de que son pobres".
Anualmente, se producen en Perú 106.000 toneladas de hoja de
coca, de las cuales sólo nueve mil toneladas pueden ser
utilizadas legalmente por la Empresa Nacional de la Coca, por
lo que se deduce que el resto está dirigido al narcotráfico.