Nueva marcha contra reforma
Redacción BBC Mundo

La policía metropolitana de Caracas usó cañones lanza agua, balas de goma y gas lacrimógeno para dispersar una protesta encabezada por miles de estudiantes universitarios que marcharon en contra de la reforma constitucional planteada por el gobierno del presidente Hugo Chávez.

El objetivo de la manifestación era ir a la sede del Consejo Nacional Electoral (CNE) para solicitar la postergación de la consulta popular prevista para diciembre de este año donde se le pedirá a los venezolanos si aceptan los cambios a la carta magna, que entre otras cosas, permiten la reelección presidencial indefinida, la eliminación de la autonomía del Banco Central y la reducción de la jornada laboral a seis horas.

Un grupo de estudiantes pudo ingresar a la sede del CNE donde presentó su propuesta de postergación del referendo, argumentando que la población necesita más tiempo para analizar los cambios propuestos por el presidente Chávez y más recientemente, por diputados de la Asamblea Nacional.

"Queremos ser tomados en cuenta"

Al final del encuentro entre los líderes estudiantiles y varios rectores del CNE, encabezados por la presidenta del organismo, Tibisay Lucena, los universitarios intentaron encadenarse a los pasamanos de la escalera principal de la institución para que fuesen "tomados en cuenta".

En ese momento comenzaron los roces entre las fuerzas del orden público y los manifestantes que terminaron en intensos enfrentamientos en los alrededores de la institución.

Las autoridades informaron que los choques dejaron un saldo de seis policías y un estudiante herido. Sin embargo, imágenes de medios de comunicación mostraron un número mayor de manifestantes con lesiones.

La manifestación partió desde la sede de la Universidad Central de Venezuela donde se veían pancartas con consignas como "No a la violencia", "No a la reforma", además de fotografías de algunos diputados oficialistas calificados de "Vende patria".

Batalla campal

Las escaramuzas se iniciaron cuando los estudiantes intentaron traspasar la barrera policial colocada cerca de la sede del CNE, arrancando las rejas levantadas por efectivos de la policía metropolitana.

A partir de allí se produjo una batalla campal con botellazos, piedras y palos lanzados desde la protesta de estudiantes, respondida con chorros de agua, balas de goma y bombas lacrimógenas desde el cerco establecido por la policía antimotines que marcaba la división entre los manifestantes y una pequeña concentración de simpatizantes del gobierno.

"Los venezolanos son testigos de cómo le lanzaron piedras, palos y rejas a los funcionarios policiales", denunció en rueda de prensa el ministro del Interior, Pedro Carreño. El funcionario calificó a los estudiantes universitarios de "grupos fascistas y antidemocráticos".

Por su parte el líder estudiantil, Freddy Guevara, presidente del centro de estudiantes de la Universidad Católica Andrés Bello, afirmó que aunque lamentaba lo ocurrido, la marcha intentó en todo momento "llamar la atención" del país sobre la necesidad de postergar una consulta popular que consideran que ha sido convocada demasiado rápido.

"Que vayan al Tribunal Supremo"

"Cada vez que vamos a un lugar, a un poder nacional a exigir un derecho, a no mendigar nada ni solicitar nada del otro mundo, sino a exigir que se respeten los derechos de los venezolanos, nos tratan como si fuéramos gafos (tontos) por eso nos encadenamos", dijo Guevara.

"Quieren obligar al pueblo a que decida en sólo 30 días", aseguró el líder universitario.

Sin embargo, algunos funcionarios del CNE aseguraron que no les compete a ellos postergar la consulta popular ya que por ley están obligados a convocarla en un mes.

"Que vayan al Tribunal Supremo de Justicia si quieren que se posponga la consulta", afirmó el rector del CNE German Yépez.

En todo caso, Stalin González, líder del centro de estudiantes de la Universidad Central de Venezuela, aseguró que ya cumplieron con presentar su propuesta a las autoridades electorales y que esperan que sean escuchados.

Aún así los mismos estudiantes que protagonizaron la marcha de este jueves ya anunciaron una nueva movilización con las mismas consignas hacia la sede del Tribunal Supremo de Justicia para el miércoles de la próxima semana.