(Actualiza con declaraciones de Aristide en párrafos 6 y 7 ) Por Jim Loney y Alistair Scrutton
PUERTO PRINCIPE, feb 27 (Reuters) - Rebeldes haitianos tomaron una importante localidad camino hacia Puerto Príncipe, donde el presidente Jean-Bertrand Aristide preparaba el viernes su defensa contra una rebelión que amenaza derrocarlo.
La captura del pueblo Mirebalais por ex soldados llamados "Assaillants" (Atacantes) permitió a los rebeldes preparar las condiciones para un inminente asalto a la capital.
El grupo de ex militares liberó a decenas de prisioneros que se hallaban recluidos en la cárcel local y colocó barricadas en las calles del poblado.
El jefe de los rebeldes, Guy Philippe, un ex jefe policial acusado de tramar golpes que volvió de un exilio en República Dominicana, dijo que los hombres bajo su mando están esperando órdenes para atacar Puerto Príncipe.
Por su parte, Aristide dijo el viernes que Estados Unidos debe defender la democracia en Haití y declaró una vez más que no tiene intención de renunciar.
"Si él (el presidente estadounidense George W. Bush) nos puede ayudar a tener una policía internacional ahora mismo en Haití, incrementar el número de esa policía internacional que ya está en Haití, eso puede ser una buena señal hacia esos criminales", dijo Aristide, hablando desde la capital haitiana en una entrevista con la cadena CNN.
En Washington, funcionarios del Departamento de Defensa dijeron que estaban considerando enviar un grupo de tres buques de la Marina estadounidense para que los marines ayuden a lidiar con la crisis que afecta a la nación caribeña, de ocho millones de habitantes y la más pobre del hemisferio.
Estados Unidos dijo el viernes que repatriaría a más de 500 personas que escaparon por mar de Haití. El gobierno de Washington teme que la sangrienta rebelión en Haití provoque un éxodo masivo desde el país antillano hacia las costas del estado norteamericano de Florida.
Por su parte Brasil envió el viernes un avión a Haití para evacuar a los brasileños que deseen abandonar el país y proteger su embajada, informó un portavoz del Ministerio de Defensa.
La aeronave de la Fuerza Aérea Brasileña (FAB), que partió en desde una base aérea en Río de Janeiro, también podrá evacuar ciudadanos de otros países sudamericanos, agregó.
FUERZA INTERNACIONAL
El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas declaró su disposición de aprobar una fuerza internacional de seguridad para Haití, pero sólo si el gobierno y la oposición alcanzan primero un acuerdo para compartir el poder y poner fin a la violencia.
Bush, también ha considerado que quizá sea necesaria la presencia de una fuerza internacional de seguridad, una vez que se alcance un acuerdo político.
Aristide, ante la amenaza del ataque rebelde a la capital, pidió ayuda internacional para restablecer el orden en el país.
El ex sacerdote católico se convirtió en 1991 en el primer presidente elegido democráticamente en Haití, pero pronto fue derrocado por un golpe de Estado. Regresó al poder en 1994 tras una invasión estadounidense y fue reelegido en el 2000.
Sus enemigos políticos lo acusan de violaciones a los derechos humanos y corrupción.
En París, un equipo haitiano encabezado por el canciller Joseph Philippe Antonio se reunió el viernes con funcionarios franceses para buscar ayudar contra la rebelión de tres semanas en la ex colonia francesa.
Después de las conversaciones, Francia dijo que Aristide debería renunciar. El canciller Dominique de Villepin dijo en un comunicado que el presidente "tiene una gran responsabilidad en la situación actual y por eso debería sacar conclusiones".
A pesar de peticiones similares de Estados Unidos, Aristide ha dicho que permanecerá en el poder, lo que podría derivar en enfrentamientos entre los rebeldes y la fuerza nacional de policía, de unos 4.000 miembros pobremente entrenados.
La ONU dijo el viernes que estaba retirando a todo su personal no esencial de Haití. Unas 90 personas --incluyendo a las familias de los empleados de la ONU-- fueron retiradas de Haití el jueves, dijo el viernes una portavoz del organismo internacional, que rehusó, por razones de seguridad, precisar el número de funcionarios que permanecía en Haití.
La agencia de las Naciones Unidas encargada de los asuntos de los refugiados exhortó el viernes a los países vecinos de Haití para que concedan asilo a los refugiados que escapan del país a medida que aumenta el caos.
Alrededor de 400 haitianos han salido huyendo de su patria en busca de asilo en la República Dominicana (unos 300), Jamaica (62) y Cuba (30) desde el surgimiento de la violencia a comienzos de febrero, según el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados. ((Mesa de edición en español: +1 305 810 2625)) REUTERS HMP JRP JCV JRP/